Cuando os detenéis en un refugio, el apetito nunca falta y la acogida, siempre atenta y cuidada, os atrae con platos típicos que siempre os dicen “cómeme”. Hoy os señalamos un plato que tiene orígenes austriacos y que gustará mucho, especialmente a los más golosos. Se trata de una tortilla dulce llamada “kaiserschmarren” o más simplemente “tortilla del emperador” (al parecer le gustaba mucho a Francisco José). ¡Hay que probarla, al menos una vez!
